29.1.07

Banana Monarchy



Desde el principio de los tiempos, los árbitros han sido un elemento animador en el fútbol. Presupuestos astronómicos, años de entrenamiento y toneladas de ilusiones están en manos de semiprofesionales cuyo lema parece ser “errar es humano”. Resulta curioso que la Humanidad, creadora de maravillas como el ajedrez, el GPS y el fuera de juego, sea incapaz de aplicar su ingenio a algo tan simple como la justicia en un terreno de juego. Privados de cualquier avance tecnológico, los árbitros son tratados como sacos de boxeo cuando se pierde y ninguneados cuando se gana. Errar es humano, eso es cierto y comprobable cualquier fin de semana, e incluso entre semana si hay Champions o sales a ligar el jueves. Hay árbitros buenos (como por ejemplo..., y otros muchos), regulares y malos. A los malos se les reconoce fácil por su facilidad en no dar ni una y cargarse el espectáculo. Pero hoy hablaremos de otra clase de árbitro: el hijoputa.


El árbitro hijoputa por definición es mandrilista. Inequívocamente, beneficia al Real Mandril y perjudica a los contrarios, especialmente al Barça. Según la talla intelectual del individuo, podemos establecer dos subcategorías: el hijoputa listo y el hijoputa tonto. El tonto, también conocido como macho ibérico, es un tío directo. Pita un penalty a seis metros del área, expulsa a alguien por respirar y suele tener aire de Guardia Civil. El listo, en cambio, es más sibilino y aplica la teoría de la gota malaya: no toma decisiones escandalosas, sino que se dedica a ir jodiendo poco a poco, faltita a faltita, minando el trabajo del centro del campo. Estos son muy peligrosos porque no salen en los resúmenes televisivos pero te joden vivo.


Este miércoles, en partido de repesca organizado por la PBBP, nos visita un espécimen único: el hijoputa listo y tonto a la vez. Este personaje (Rodríguez Santiago, para más señas) arbitró el partido de vuelta de la eliminatoria de Copa del año pasado en la que el Zaragoza nos dejó fuera, donde dio un recital de arbitrariedades digna de recordar: nos pitó más faltas en contra que en todo el resto de temporada y expulsó a Dios por tropezar con un contrario. Tan divina expulsión no se recuerda desde Descartes. Poco después se supo que días antes había apostado, tomando cañas en el bar de su pueblo, que el Barça no pasaba la eliminatoria. En resumen: un hijoputa de tomo y lomo.

Pero no olvidemos que estamos en una monarquía bananera: el Comité de Competición, gobernado por tres socios mandrilistas (¡!), ha vuelto a designar al tomo y lomo como árbitro del Barça – Zaragoza de este miércoles, de nuevo en la Copa del Rey. Esperemos que Dios lo coja confesado.

En lo deportivo, los maños vienen algo mermados por las bajas del fabuloso Aimar y de Piqué, un canterano del Barça fichado por el Manchester Utd. y cedido al Zaragoza esta temporada. Por lo demás, siempre se trata de un equipo peligroso con juego alegre que te puede dar un disgusto. Mr. Carlos y Mr. More tiene la oportunidad de recuperar puntos. Los demás, estáis invitados a expresar vuestras más íntimas reflexiones.

FCB – Zaragoza. Dimecres 31, 22:00. El fan per tele3

PARTIDO DE REPESCA.

4 comentaris:

Anònim ha dit...

fcb 2
zrgz 0

Presiento que este comentario va a estar muy solito por aquí...como no aparezca Mr. More...Mr. More?...Moreeeeeeeeee!!!!!!

Anònim ha dit...

Aqui estoy Gañaaaaaaaaaaaaaaaaaaan!

FCB:2
Zrgz(ilegible):1

Hoy me he acordado y prontito q me he acordado, pero....que no sirva de precedente...;)

Anònim ha dit...

Barça X
ZGZ Y

X+Y=5
X*Y=6

El partido será no lineal.

Anònim ha dit...

Obviamente, IP65 ha sido el más acertado